Reparación de Lavadoras: Pasos para solucionar los daños más comunes

Daños comunes de las lavadoras 

Las lavadoras son máquinas diseñadas para funcionar con altas cargas de trabajo y, en consecuencia, no suelen tener problemas; sin embargo, conviene estar preparado para cuando se presenta un inconveniente.  

Para ayudarte a solucionar estos pequeños grandes problemas, aquí pasamos a enumerar las fallas más comunes con las que te puedes encontrar al momento de poner a lavar tu ropa: 

• La máquina no parte: por lo general, este problema está asociado a una mala conexión con la red eléctrica. También se puede deber a un problema con la presión del agua, a una congestión en el filtro o a que la puerta no cierre correctamente. Mejor revisa bien el electrodoméstico para asegurarte que no se trata de un problema de mayor envergadura. Quizás sea hora de hacer una revisión a fondo de tu lavadora.
• Ruidos extraños o excesivos: cuando sientes que tu máquina para lavar la ropa emite extraños sonidos probablemente se trate de una falla en el filtro, algún rodamiento suelto, un desajuste en el tambor o un desperfecto en el desagüe. Se trata de uno de los problemas más comunes entre quienes envían a reparación su lavadora y una señal clara de que necesitas un técnico especializado.
• Fuga de agua: si notas que hay humedad o directamente agua que sale por debajo del electrodoméstico, lo más seguro es que se trate de un problema de filtración. Esta fuga se puede ocasionar por una rajadura en el tambor, por una obstrucción del filtro o se porque este se movió de su lugar.  Al no encontrar una salida,  el agua puede  filtrar por los lugares más insospechados. Como dice el dicho: El agua siempre busca su camino. De todos modos, es una señal evidente que tendrás que consultar a un especialista en mantención de lavadoras.
• Problemas con el centrifugado: si el tambor de tu preciado electrodoméstico no está en perfectas condiciones lo primero que se reciente es el centrifugado. Recuerda que esta fase del lavado es la más exigente ya que debe girar a altas revoluciones. El resultado: la ropa sale de la lavadora mojada.  Quizá estás cargando con mucho peso la lavadora y esto puede dar como resultado un centrifugado defectuoso.

¿Cómo puedo reparar mi lavadora? 

Como hemos visto, los problemas que puede presentar una lavadora son de distinta índole y alcance. Las soluciones también pueden ser diversas, muy complejas mientras otras pueden ser más simples. 

Cuando se trata de problemas que van más allá de un objeto que impide el cierre de la puerta del tambor o la limpieza del filtro frontal, lo mejor es que recurras a manos especializadas en la reparación de lavadoras.

Si la lavadora no parte, verifica los siguientes factores antes de llamar al técnico para que puedas explicar bien qué problema tienes con tu máquina:

• Verifica la conexión a la red eléctrica: Lo primero que debes hacer es inspeccionar el cable. Es normal que la máquina se mueva durante el ciclo de lavado, incluso violentamente. Esto puede provocar una presión indebida al cable y dejarlo sin funcionamiento. 
• Revisa el filtro: la basura, el cabello, el papel y muchos otros residuos que a veces ni siquiera notamos pueden obstruir el filtro y el flujo del agua, por lo que algunas lavadoras dejan de funcionar.  
• Asegúrate de que la puerta cierra bien: la goma que permite el cerrado hermético a veces se llena de objetos pequeños como monedas, papel, lápices o bolitas de cristal que generalmente niños y niñas olvidan en su ropa. Alguno de estos elementos puede impedir el perfecto funcionamiento de la puerta y como resultado la lavadora no funciona. 
• Revisa la presión del agua:  comprueba que la corriente de agua sea la apropiada. En ocasiones, por los cortes de suministro, las cañerías pueden desprender pequeños trozos de sarro que se alojan en el filtro de entrada a la lavadora y entorpecen el flujo. Sin agua o con poco caudal la lavadora no enciende.